Sin duda, desde el punto de vista decorativo y conceptual, se trata de la portada más densa, abigarrada y bella de la Catedral de Guadix, respondiendo claramente al ideal del barroco católico. Juega magistralmente con los volúmenes de los diferentes espacios que la componen. Realizada a modo de arco triunfal, está flanqueada por pares de columnas corintias, medallón central con la heráldica catedralicia (Jarrón de Azucenas) y sobre él la hornacina que acoge la imagen del Apóstol Santiago, obra de Francisco Moreno.
Registrarse
¡Bienvenido! Ingresa en tu cuenta
¿Olvidaste tu contraseña? consigue ayuda
Crea una cuenta
Crea una cuenta
¡Bienvenido! registrarse para una cuenta
Se te ha enviado una contraseña por correo electrónico.
Recuperación de contraseña
Recupera tu contraseña
Se te ha enviado una contraseña por correo electrónico.