Bodegas Muñana, tres oros y dos platas en AWC Viena (Austrian Wine Challenge), uno de los certámenes más importantes del mundo.

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Seis vinos de esta bodega granadina vuelven a recibir galardones de la crítica internacional, demostrando el potencial y la calidad de la producción vitivinícola de la provincia.

AWC es uno de los certámenes más importantes y estrictos del mundo. Si tenemos en cuenta que durante 2018 han competido 12.402 vinos de 1.716 productores procedentes de treinta y nueve países, y que el sistema de evaluación son catas a ciegas realizadas por enólogos internacionales, analistas de vinos, sumilleres, restauradores, comerciantes y periodistas especializados, nos haremos idea del nivel de sofisticación y competitividad de esta edición.

Los requisitos y la envergadura del concurso austríaco, dan idea de la importancia que suponen estos galardones para los seis vinos premiados de Bodegas Muñana.

Muñana Petit Verdot, 2010. Medalla de Oro.
Muñana Tres Cepas, 2012. Medalla de Oro.
Delirio Joven Syrah, 2017. Medalla de Oro.
Delirio Roble Merlot, 2016. Medalla de Plata.
Muñana Rojo, 2013. Medalla de Plata.
Delirio Blanco, 2017. Sello de aprobación.

Para Bodegas Muñana está siendo un año excelente en lo que a reconocimientos internacionales se refiere. El pasado mes de septiembre, James Suckling –uno de los críticos más influyentes del mundo– puntuó cinco vinos tintos de Muñana con calificaciones sobresalientes, a partir de noventa puntos, y un blanco con ochenta y seis. Unas semanas antes, la bodega con sede en Cortes y Graena vio reconocida su labor con dos medallas (Oro y Plata) en el certamen asiático CWSA.

Estos seis nuevos reconocimientos consolidan a Bodegas Muñana como una de las bodegas más potentes de Granada y un referente en cuanto a la calidad de los vinos andaluces.

La altitud, la pureza de las aguas –procedentes de Sierra Nevada– y el “terroir” del terreno, confieren a sus vinos una personalidad especial y una altísima calidad.

Bodegas Muñana tiene entre sus principales objetivos la internacionalización y exportación de su producción, situando los vinos de Granada en primera línea de los mercados globales.